lunes, 1 de septiembre de 2008

Calidad contra Demagogia

Hola a todos,

Tras haber aterrizado en Murcia las cosas funcionan…a su ritmo pero lo hacen. Nos encontramos con dos elementos que no es que paren, pero ralentizan la evolución de Horizon Media y de los proyectos en los que nos encontramos inmersos:

1. El Verano o hibernación estival.
2. La crisis.

Podríamos pensar que el segundo punto es determinante a la hora de lograr los objetivos sin embargo, lo mas sorprendente es que lo que sí es determinante es el punto uno. Yo creí que los partidos se jugaban hasta el último minuto.

Esta ralentización sin embargo me ha permitido mover otros aspectos de la producción e ir consolidando el proyecto de empresa…aprovechando la estancia en el cortijo actualizando lectura que tenía atrasada. Esto me lleva a compartir una pequeño fragmento del último ensayo de uno de mis héroes: Albert Boadella.

Su último libro titulado “Adiós Cataluña”, es una autobiografía que consta de dos partes: una en la que describe sus vivencias personales y, por otro, su faceta profesional. En uno de los capítulos habla de las desavenencias que surgieron dentro del grupo teatral “Els Joglars” en una época como fue la transición Española, donde a todos aquellos grupos no alineados con la oficialidad se les pedía (o exigía) una implicación política y por ende de desafío contra “el sistema”. Esto provoca un enfrentamiento dentro del grupo teatral pues Boadella consideró que las críticas contra el sistema debían circunscribirse a la escena y que no debían ser parte activa en los sucesos que entonces ocurrían, cosa que muchos afectos al partido comunista y escisiones nacionalistas de este así pretendían. Este enfrentamiento finalmente desemboca en la separación de los diferentes miembros de “Els Joglars” como fruto de estas discrepancias.

Con respecto a esto, Boadella dice lo siguiente:

“Al margen de la anécdota gremial que este enfrentamiento y la frustración artística que supuso, las actitudes de estos jóvenes constituyen un fiel reflejo de lo que posteriormente ha sido la implantación generalizada de la impostura progre. Gente poco preparada en general, que acostumbra a ver enemigos en todo lo que no esta dentro de sus excelsas letanías de libertad, paz, solidaridad y bla, bla, bla,.

Por ello fuerzan siempre la cohesión entre mediocres, con el fin de conseguir por la mayoría lo que no pueden realizar individualmente”.

Sigue posteriormente con lo siguiente:

“Empezaba a emerger una nueva casta cuya clave de actuación se apoya en la destrucción del mérito y, por consecuencia, en la alianza entre fervientes mediocres, lo cual lleva a una selección en la que los peores siempre tienen la mejores oportunidades de medrar.

Paradójicamente aquellas víctimas crónicas del maléfico sistema capitalista se han transformado ahora en un nuevo poder sectario que actúa impunemente bajo la franquicia de la verdad absoluta”.

Contundente, certero, rotundo. Subscribo plenamente estas palabras. Es más esto me lleva a una reflexión con respecto al mundo del arte sea pintura, cine, etc.

¿A que se debe el hecho de que la cultura y sus diversas expresiones vanguardistas tengan todas el leit motif de una palabra que odio: la transgresión? Por una cuestión muy simple: por su incapacidad para crear belleza. Esta transgresión, o provocación como antes se llamaba, inhibe al autor de tener que crear belleza pues la ausencia de talento se suple con opiniones contundentes acerca del mundo…o le que sea menester.

Existen evidentemente en mi opinión excepciones como son Anish Kapoor o Sicilia o cineastas como Ang Lee que consiguen eso: crear belleza que es, al fin y al cabo, lo que permanece.

Interpretar el mundo ¿es crear belleza? Pienso que una de las funciones del arte es hacer bello lo cotidiano cosa que pintores como Antonio Lopez consiguen excepcionalmente. Del mismo modo interpretar el mundo en el que vivimos de forma que podamos abarcarlo (como tantas veces han hecho Monty Python) es otra manera de crear belleza. ¿Puede ser un chiste bello o arte? Pienso que sí, pues la belleza al fin y al cabo surge de la transmisión o provocación de unas emociones. ¿Entonces porque la transgresión (si provoca emociones) no puede ser belleza? pues porque la transgresión pretende provocar una opinión apelando a la razón y no a un sentimiento. Que difícil es mover las emociones pero el mismo tiempo manipularlas…¿verdad ZP? ¿a que estoy en lo cierto Goebbels? ¿A que es muy cercano a lo que tu pensabas Stalin?

Calidad, talento, calidad y calidad...y sin aburrir ¿eh?

Saludos a todos,

JE

2 comentarios:

Antonio Rentero dijo...

Interesante reflexion y MUY ACERTADA.

Tristemente, en estos tiempos zapatastroficos que nos ha tocado vivir el merito, la preparacion y el esfuerzo son cosas rancias y trasnochadas, vaya, justo lo contrario de la transgresion, es la generacion CQC, preguntar sinsentidos envueltos en el gamberrismo irrespetuoso, arropados por la inconsciencia y la ignorancia, todo con tal de arrancar una risa bobalicona.

No recuerdo a que personaje (igual fue a Ruin Gallardin) le lanzaron una de esas preguntas ingeniosas que solo sirven para dejar como tonto al interpelado y este respondio con habiles reflejos: "Ahora mismo y con tanta premura no podria responderle, pero si me deja el mismo tiempo y el mismo numero de guionistas que usted ha necesitado para alumbrar tan ingeniosa pregunta estoy seguro de que podre contestarle algo al menos tan ingenioso y divertido".

Un signo de los tiempos que no es exclusivo de España. Ya que hablas de Ang Lee, hace tan solo 5 años saco su peli de La Masa, incomprendida joyita visual, alarde de creatividad narrativa y quiza a ratos soporifera reflexion sobre la contencion y el purgatorio de los pecados del padre... evidentemente este año han echado todo eso por la borda y los estudios han alumbrado otra version de La Masa, igualmente interesante pero carente de todo pulso artistico y convertida en un mero instrumento de expansionamiento visual y desconexion cerebral. Divertida y asombrosa, pero tan "mainstream" que nos deja a cuatro gatos contentos pero no satisfechos mientras que "la masa" (vamos, el publico) recibe su racion de "panem et circenses" con el sabor habitual, no sea que les de por pensar... acabaramos!!!

Lo triste es que todo lo que narra Boadella sucedio hace 30 años y hoy seguimos en lo mismo. Sic transit gloria mundi...

Prandez dijo...

Pepito ¿¿cómo van las cosas??

¡¡actualizanos!!